La creación del Country Club LDU surgió por la necesidad de que los deportistas de nuestra institución cuenten con una casa propia. En sus inicios, el Club comenzó con 500 sucres y los jugadores debían ir al parque El Ejido con palas y picos para armar los arcos. Además, tenían que asumir los costos en rubros como uniformes, vendas, y pomadas.
A mediados de los años 70, gracias a la ardua gestión del Sr. Rodrigo Paz Delgado, se logró levantar un centro de entrenamiento para la división profesional y las divisiones formativas. Así como también para ofrecer a los socios del Club un espectacular sitio de descanso en el norte de Quito, con 32 hectáreas entre construcción y bellos espacios verdes.
Con el respaldo del Ing. Edwin Ripalda, presidente en ese entonces y bajo la supervisión de Guillermo Vilac, el Club se puso en marcha. Día a día se perforaron pozos, instalaron tuberías y sembraron los árboles que hasta hoy presentes en el complejo de la Mitad del Mundo.